El menú del día estaba bueno, 10,50€ un sábado, relación calidad precio excelente. La comida esta buena me gustó todo, la croquetas muy buenas,las alubias también, el salmón...El pollo asado estaba muy seco. La cantidad de los platos también bien menos la ensaladilla me pareció un poco escasa.Los camareros atentos y simpáticos, pero había mucha gente y aunque nos atendieron enseguida y nos trajeron las bebidas muy rápido por la comida tuvimos que esperar mucho.
Fuimos un grupo de 40 personas. El local es como una bodega. La comida es casera y todo el que quiso pudo repetir. La atención muy buena y todo por el módico precio de menos de 12€ con café o carajillo incluidos.
Excelente atención y muy buena comida, además de eso el lugar es encantador. El comedor está en una antigua bodega, lo que lo hace muy fresco y acogedor. La cocina es variada y con muy buena sazón
Buen trato...a los peregrinos...aunque no había menú.. la comida tenía buena relación calidad precio...los dueños son muy atentos..y se agradece...excelentes pintxos caseros en barra..
Un lugar genial para comer o cenar y relajarse junto a unas vistas increibles de la iglesia. El servicio muy bueno los camareros muy atentos y muy agradables sin duda un lugar para repetir.
Un lugar acogedor, con buen ambiente, buen servicio y buena música. Buena relación calidad precio, los camareros muy atentos y serviciales. Un lugar para recomendar y repetir.
Buen sitio para tomar unos pinchos.
Los bocatas tambien los recomiendo, pesan y eso es muy buena señal.
Un lugar encantador, con buen servicio u buena comida. El restaurante es precioso
Un trato muy agradable por parte del los camareros y buenas vistas de la iglesia combinado con buena comida
Buen menú del peregrino para comer en la terraza en verano cuando haces el Camino. Los camareros muy correctos.
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