¡Absolutamente un lugar fantástico! Abierto temprano en la mañana del sábado (a diferencia de otros cafés que están cerrados). El interior es verdaderamente encantador. La comida es increíblemente deliciosa y exquisitamente preparada, ¡aunque solo tomamos el desayuno! 🔥
Decoración espectacular! El local es una pasada, de amplitud, de gusto en cada detalle y con una terraza exquisita.
Nos ha dejado encantados.
Los postres just amazing! Cheesecake y carrotcake deliciosas!
Además, hasta la vajilla está elegida con mimo.
Las camareras súper amables y risueñas.
Volveremos a probar el resto de la carta.
Totalmente recomendable!
Un lugar con encanto ,una decoración preciosa con muebles antiguos , muy buen gusto en la decoración, lugar ideal para desayunos con una carta variada.
Personal atento ,algo lentos
Una preciosa cafetería, decorada con mimo y buen gusto. Mobiliario en su mayoría antiguo, un precioso piano, utensilios varios de hace 100 años o más. Todo limpísimo.
Desayuno muy rico, a buen precio.
Camareras encantadoras que te atienden siempre con una sonrisa.
Vistas de la Catedral desde uno de los pisos. Tiene otro nivel inferior con vistas a un jardín en donde también hay mesas.
Totalmente recomendable!
El local es precioso, la decoración ideal, el servicio es muy atento. Los precios son un poco más altos que la media, pero vale la pena.
Djao Omar Valente Da Fonseca
+5
Simplemente espectacular!!!!...
Nos habían recomendado ir a comer y ha sido un verdadero acierto...
Desde la decoración... Hasta la comida... Pasando x el servicio... Todo de 10!!!!...
Empezamos con un timbal de langostinos... Seguimos con una barca de zamburiñas y acabamos con una croca... Todo exquisito!!!!... Hasta el pan sin gluten se deshacía en la boca...
Encantados es poco decir!!!... Repetiremos seguro!!!!...
Increible!!
Un restaurante fantástico si tienes oportunidad, disfrutaras de cada plato.
La atención del personal inmejorable.
Felicidades por el buen hacer.
Cafetería y Restaurante decorado con mimo y elegancia. Un espacio gastro donde disfrutar de un brunch a primera hora o una cena con amigos.
El restaurante tiene una decoración espectacular. El servicio muy atento y sus arroces son un espectáculo. Nosotros probamos el arroz al horno con presa ibérica y las alcachofas que estuvieron de 10.
Sitio ideal, quizás recargado en exceso, pero apetecible para ir de vez en cuando. Es muy agradable.
Habíamos ido a desayunar anteriormente y la verdad es que el desayuno es fantástico, porque tienes a un precio igual que cualquier sitio, si te ciñes a un típico desayuno español(tostadas,bollería, café y zumo) pero con una cubertería, una vajilla y un mimo en la presentación que marcan la diferencia. Todo rico por supuesto.
Nuestra segunda visita ha sido a comer. Al igual que el local, en la presentación cuidan también mucho la apariencia, y todo el conjunto es muy instagrameable, pero insisto todo está rico.
La atención del personal demasiado informal para el tipo de local para mi gusto.
Perfecto para recomendar para comer. La camarera encantadora, fue nuestra primera vez y nos sentimos como si fuéramos clientes habituales. Es un lugar con encanto que enamora
Un sitio precioso y muy buena atención por parte del personal. Los daikiris están increíblemente buenos, y las croquetas deliciosas, sobre todo las de boletus y trufa. Volveré seguro.
Ignacio de la Cierva García
+5
Un 10 en todos los aspectos.
El lugar está cuidadosamente decorado y ambientado como si fuese un cuento de los hermanos Grimm, con sus lámparas de telaraña y piano de cola en su interior y su jardincito y casetas acristaladas en el exterior.
La comida te la presentan con buen gusto y está espectacularmente buena. Os dejo una foto de su plato estrella, el barco de zamburiñas de Marie Miner, y de su croissant francés con triyaki para que se os caiga la baba.
Mención aparte merece su coctelero, Pablo Mosquera. Pablo prepara todos sus brebajes con mucho mimo para que sean puro goce al paladar. Además, se nota que ama su trabajo por la pasión que demuestra al explicar cómo los prepara y revelar los exóticos ingredientes que llevan.
Un sitio curioso, la decoración es preciosa, no tiene un concepto claro, pero no es que eso sea malo, al contrario lo hace único, especial y diferente a lo que puedes escontrar en el casco antiguo de Santiago. Había entrado un par de veces sólo por un café y un postre y la verdad la experiencia no fue grata con la atención nos trataron fatal. Pero fuimos a darle otra oportunidad y esta vez comimos y he de decir que la atención esta vez fue estupenda, casi personalizada diría yo. Los platos servidos con buen gusto y exquisitos, no es económico, pero merece la pena. El jardín trasero es de ensueño, estaría bien para eventos si el clima lo permite. En fin sin duda volveremos.
Lugar espectacularmente montado y con una atención por parte del personal de 10! Pedimos unos cafés mientras mirábamos la carta y eso ya vino acompañado de un trozo de bizcoy, un mini zumo y un mini sándwich. Luego cada uno pedimos una tosta diferente, yo que probé todas estaban buenísimas!!! Desde luego un lugar en el que repetir o en el que probar un brunch. Sin duda alguna volveremos!!
Cuidado , precio un poco alto ¿pero merece la pena?
Yo pienso que si y tu ya me contarás !!!!
El lugar tiene mucha magia , acogedor y fresco en verano. Te pides tu cerveza q la tiran bien y es un copón de buena mahou.
Te ponen el aperitivo , en este caso unos garbanzos en ensalada 🥗 con su toque chic y unos frutos secos.
Yo creo q la experiencia merece la pena aunque lo pagas , pero ven sin prisa y a disfrutar el momento.
Un restaurante atípico, diferente de lo que puedes esperar en una ciudad tan turística, pero es, para mi, solo su primer mérito. Te llama la atención por su extraordinaria y elegante decoración que ocupando todo el ambiente de las dos plantas del local no me parece recargada y lo que más me gustó es que prima la amplitud para los comensales, no aprovechando el espacio para poner el mayor número de mesas, el salón de arriba, por ejemplo está presidido por un magnífico y señorial piano de cola. La atención que recibimos las tres veces que estuvimos, dos desayunos y una cena, fue muy buena. En el primer desayuno no pudimos resistirnos a la completísima y original cesta de picnic. El segundo, más tradicional, te lo adornan con unos zumos originalmente servidos. La carta, para la cena, ofrece bastantes y variadas posibilidades y las raciones son generosas, los postres muy ricos y hasta los aseos están bien decorados. El clima no permitía disfrutar de la terraza pero daba la impresión de ser muy agradable con buen tiempo.
He ido a degustar un Menú del día de la madre con mi familia, espectacular, todo delicioso de 10 y acompañado por un buen vino que nos ha aconsejado un camarero, el cuál nos ha atendido de forma muy profesional. El Restaurante es espectacular, de ensueño. Precios y calidad equivalentes sin duda. Repetiremos pronto seguro.
He vuelto el día 29/06/2023 y ha cambiado para mejor, mejor servicio, un buen ambiente y la mano de la cocina al 100 por 100 como siempre. Excelente. Repetiré fijisimo
Sitio súper agradable, muy recomendable. El único pero es que la música del día que estuvimos no pegaba con el ambiente del lugar.
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