Entramos de casualidad y sinceramente, nos sorprendió en gran manera.
Para merendar tienen una oferta increíble, 3'50€ tarta (carrot cake, en mi caso) + capuchino; y muchas más variaciones.
Tanto nos gustó que fuimos ha cenar. Cenamos de picaeta, los platos cumplidos, buena calidad y precios económicos (cenamos 3 y contando las bebidas + los 5 platos que comimos, la cuenta fue menos de 50€)
Los camareros muy amables y el servicio bastante rápido (fuimos a las 21:00h)
ANA MARÍA es la mejor de todas. Es muy amable y atenta. La comida está buena y los cafés también. Lo único es que no me parece normal que el pedido venga por fascículos. Es decir entre el café y el croissant 14 min esperando (con lo cual, café frío) y entre las tostadas (que llegaron con el croissant) y los zumos otros 5 min..
por lo demás todo bien.
Todo muy bueno, el personal muy educado y correcto, hoy me he pedido humus y la ración es generosa, el cocinero debe ser muy bueno, por qué siempre está muy bueno y muy bien presentado todo.
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