Ambiente muy acogedor. Personal amable. Nos sentaron en el salón con chimenea y estuvimos muy agusto. Comida muy buena, recomendable el solomillo con salsa de castañas. Te atienden muy rápido y la comida sale rapidísimo. Importante reservar mesa los fines de semana. No dejen de probar los chupitos de la casa, que cosa más buena...
Volvimos ayer después de unos añitos, pensando que sería imposible superar lo de aquella vez. Pues si, lo hicieron y salimos muy satisfechos por el trato del personal, los platos elaborados con tanto cariño y materia prima de la zona de alta calidad. De postre casero me sorprendió el helado de poleo, exquisito y súper refrescante para el calor de estos días. Hay quien le pueda parecer caro, pero creo que se ajusta a lo que disfruta tus papilas gustativas.
La primera vez que voy y nos a gustado bastante,un sitio muy peculiar,por sus adornos de antiguedades,por su terraza y su salón.
Se come estupendamente ,yo recomiendo el lomo a la salsa de castañas,también las croquetas.La chica que nos atendió muy atenta en todo momento
Seguramente volveremos
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