Además de estar en un lugar precioso y con unas vistas increíbles, el bar( aunque en mi opinión es un restaurante) es de una calidad enorme.
La carta es variada, los productos son de calidad, los platos son sencillos, sin trampa ni cartón, un restaurante a pie de playa que ofrece comida de verdad a un precio más que correcto.
El personal muy amable y profesional.
A destacar la limpieza de la terraza, comedor y lavabos.
Es un buen restaurante con las maravillosas vistas a la playa de Arenal den Castell ,en primera fila e incluso dentro de la arena a 25 metros del agua,una maravilla que no hay que dejar escapar
Bien correcto la comida bien servicio bien por estar delante del mar elmprecio nones excesivo.
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