¡Un descubrimiento!
Fuimos sin conocer el sitio ni donde íbamos, y nos sorprendió desde el primer momento con un recibimiento personal y con una carta llena de detalles que ya auguraba una buena cena.
El buen trato te acompaña durante toda la cena mientras te van sirviendo los platos y explicando que lleva cada uno. Platos con contrastes de sabores y texturas, platos que no te dejan indiferente.
Totalmente recomendable
Restaurante increíble, platos exquisitos, sorprendentes y deliciosos. Pero lo mejor el personal, amable, atento y super profesional, nos hicieron sentir como en casa. El local muy acogedor y con cocina vista que siempre es un plus. Simplemente para repetir una y mil veces más. Gracias, volveremos seguro.
Llevábamos tiempo queriendo ir y la verdad es que ha cumplido nuestras expectativas. Llegamos 15 minutos tarde y ya habían dado nuestra mesa pero esperamos un poquito y enseguida nos reubicaron. Recomendamos estar puntuales porque es un sitio de alta demanda. No es para menos, porque manejan una combinación de sabores perfecta y un juego de texturas que es una maravilla. Nos gustó todo pero a mí me enamoró el plato de calabaza con boletus y carbonara de piñones. A mi pareja el plato que más le gustó fueron los peus de porc marimontaña (con botifarra y carpacio de gamba). Los dueños nos parecieron muy majos y el sitio es bonito, con cocina abierta, que puedes ir viendo como trabajan. La verdad es que disfrutamos mucho.
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