Karina Torralbo Van Pelt
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El mejor sitio de comida saludable en el que he estado hasta ahora. Me gusta mucho encontrar lugares que dan la opción de comer bien y este lo tiene todo. Gran variedad de platos, calidad espectacular, muy buen trato (nos encantó cómo nos atendió la camarera rubia, no sabemos cómo se llama), y un menú asequible al mediodía.
Los platos tienen todos un detallado de kcal que va muy bien, ademas del aporte proteico. Hay un apartado donde puedes hacer tus propios bowls con los ingredientes que más te gusten y hay una vitrina de postres caseros fit muy buenos también. Aunque me quedo con las french toast (cuando no me las queman xD)
Desde entonces hemos repetido siempre que podemos!
Llevaba mucho tiempo queriendo ir. Es el sitio ideal si haces dieta de algún tipo porque tienes la tranquilidad de comer fuera de casa bien y sin pasarte. Yo he elegido un bowl "greek chicken" y de postre unos pancakes proteicos con nutella "fit" (avellanas y cacao) y una bola proteica de chocolate. El bowl estaba bien, no te sirven mucha cantidad con lo que puedes pedir entrantes y postre. En lugar de patatas sirven boniato asado con las burguers y con las tiras de pollo rebozado con "panko" (muy crujientes y ricas) La salsa estaba buena aunque picaba un poco. Los pancakes estaban bien, aunque se nota que no son los típicos hechos con azúcar, tienen un sabor distinto. La salsa de proteína tiene un sabor especial, está edulcorada. Mi pareja se ha pedido el lemon pie y dice que está demasiado dulce. Eso sí, muy caro para lo que es (6€). Los pancakes también cuestan 6€ y creo que podrían ajustar más el precio de los postres, más de 4€ me parece caro.
Local con buena decoración. Un poco pequeño pero cumple. Recomiendo la ensalada César y la Hamburgesa de Pollo Rebozado. Servicio atento. Quizás el tipo de musica que se oye en el sitio rompe un poco con todo pero se perdona.
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