Itahisa Dávila Batista
+4
Restaurante japonés de verdad, todos los platos que probamos estaban muy buenos, curiosamente el más flojo que me pareció fue el de makis. No tengo problema en comer con palillos, pero estos eran redondos y se resbalaba bastante la comida. El sitio es pequeñito y tiene libros a la entrada y en una de las paredes. El dueño parece serio pero gasta bromas todo el rato. En general todo muy bien.
Roger Inglada Fernández
+4
Pedimos dos entrantes, dos platos, dos postres a compartir y junto con la bebida fueron menos de 60€.
Los entrantes eran una maravilla, desde un Tako Yaki (bolas de pulpo; 7€) digno de Osaka un Natto (judías fermentasas; 7€) que al pedirlo el dueño se quedó sorprendido y se esperó en la mesa a ver como nos lo comíamos.
Los platos principales eran de menor cantidad pero ricos igual: Unagi (angila con arroz; 11,5€) y Katsudon (cerdo empanado con arroz; 8,5€)
Del postre se podría prescindir ya que no estaban al nivel del resto de la comida. De todos modos es un buen sitio para disfrutar de una buena comida y la carta apetece investigarla.
Volveré.
Excelente comida en un ambiente íntimo. Sabor japonés tradicional. La carta no es muy extensa, pero lo que ofrecen es de muy buena calidad. Muy recomendable si quieres saborear buen sushi.
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