El sitio es muy bonito. Hay una zona con sofás muy acogedora.
El personal es muy atento, rápido y eficaz.
Nos sentaron en la mesa enseguida y los platos no tardaron nada en salir.
El emplatado era fantástico y el sabor de los platos era digno de repetir.
Además la relación calidad-precio era muy asequible (12€ el menú).
Como conclusión, ha sido una muy buena experiencia y repetiré sin duda.
Fuimos a comer entre semana con el menú de 12€, son 2 platos, bebida y postre. Hay varias opciones y a la entrada tienes los platos expuestos para poder verlos, cosa que ayuda mucho.
De primero me pedí arroz a la cubana, muy bueno, aunque quizás mucho tomate, pero el arroz en su punto. De segundo pedí una Classic Meat, es una hamburguesa con patatas y salsa de queso cheddar, la hamburguesa bien, nada destacable, he probado mucho mejores, la salsa de queso tampoco me entusiasmó mucho mucho y las patatas bien, no muy fritas, parecían hechas al horno. De postre había tarta del día, yogur griego con mermelada y fruta, yo me pedí el yogur, muy bueno.
Con respecto al personal, bien, muy amables.
En general bien, buena comida aunque sin destacar, cumple y la relación calidad-precio buena.
No está mal, las raciones son grandes y el menú de 12 euros permite elegir entre cuatro primeros platos y cuatro segundos (6 euros para niños pero sólo un plato). Camareros atentos en nuestro turno. Eso sí, el postre que nos apetecía no quedaba y lo han tenido que cambiar, y lo mismo ha pasado con un primer plato.
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