Una gozada de experiencia gastronómica y el mejor menú omakase de la ciudad sin lugar a dudas para ir en pareja.
Es una pasada ver la elaboración de los platos, el ambiente relajado y la calidad de los sabores que Sato prepara con mucha precisión y acierto.
De los 19 platos que nos cocinó (incluyendo postres), el toro macerado con soja, yema y huevo trufa y el atún con yema de huevo de codorniz son de otra galaxia.
Experiencia inolvidable, Sato es un auténtico maestro.
El local es pequeño con decoración sobria pero muy acertada y solo para 6 comensales lo que hace que la experiencia sea más íntima y que la atención este puesta plenamente en la elaboración de los platos y su degustación. Platos con gran preparación previa y con ingredientes de primerísimo nivel.
Un detalle que nos gustó mucho fue el precio de las bebidas el cual podría estar inflado y era todo lo contrario.
Con la dedicación, la calidad de los ingredientes y lo personal del trato los 88 euros de menú resultan baratos.
Restaurante auténtico japonés a cargo de sato(del reconocido restaurante SatoYTanaka). Es un local pequeño para no más de 6 comensales, todos alrededor de la barra. Solo hay opción de menú, por lo que solo hay que disfrutarlo. Todos los pasos son excelentes, producto fresco y de calidad y recién elaborados. Destacaría los niguiris de varios tipos y algunos flameados, y sobretodo el final con el helado de miso!!
El menú tiene un precio de 88€ sin bebidas incluidas.
En total estuvimos 2 horas. Ideal para ocasiones especiales e intimas es un sitio muy agradable y de ambiente relajado.
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