Restaurante amplio con muchas mesas interactivas. La experiencia es divertida ya que puedes jugar, pintar o entretenerte en unas mesas con pantallas digitales.
El pedido se hace desde la mesa y viene el camarero a confirmar. Como punto negativo, todo lo que selecciones se confirma y no puedes borrar, eso sí, luego al camarero te pide confirmar cada uno de los platos y le puedes indicar que lo seleccionaste por error.
Ambiente es con poca iluminación. En nuestro caso fuimos pronto (sobre las 20.00) y el problema fue que había muchos niños lo que generaba bastante ruido de fondo que nos incomodó y no nos dejo disfrutar del todo la experiencia. Os recomiendo evitar la primera hora de cena.
Los platos son fusión y el precio es algo elevado (aunque es comprensible porque pagas también la experiencia).
Por probar algo diferente está bien, pero no creo que repita a no ser que vaya con niños.
Buena y agradable experiencia. Tanto niños como adultos lo pasamos genial en todo momento. No gran variedad de platos pero todo lo que comimos estuvo correcto. Local muy bien decorado y muy buen ambiente. Los niños deseando volver!!!!
Fuimos porque nos llamó mucho la atención al ver el restaurante en redes sociales.
Puntos positivos:
El servicio, camareros muy atentos y amables, te explican absolutamente todo con paciencia.y muy resolutivos.le explicamos tema comida y entendieron perfectamente y dijeron que iban a mejorar.
Las mesas: muy entretenidas para ir con niños y hacer algo especial y divertido.
Puntos negativos:
La comida, el precio es muy elevado para la calidad del producto, habiendo visto el menú en la tablet y en redes sociales nos llamó mucho la atención, pero al probar la comida nos decepcionó, pedimos 4 platos y todos coincidimos en que estaba muy insípida.
Por el precio nos esperábamos comer algo con más sabor y de más calidad.
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