¡Qué buena experiencia! Al parecer este asador es muy frecuentado por moteros, y yo lo pude conocer gracias a un familiar que lo descubrió un día que salió a hacer su ruta habitual en moto. El salón del restaurante me sorprendió, puesto que hay bastante separación entre mesas y, además, muy luminoso. Cuenta con una pequeña terraza en la parte de atrás que, para el verano, debe ser estupenda. Los chicos que te atienden son muy agradables, y la comida es espectacular! Pudimos degustar lo siguiente: - Alitas de pollo: vienen acompañadas de dos salsas muy ricas. - Entrecot: excelente carne! Te viene 2 grandes porciones para que no te quedes con hambre. - Hamburguesa ruta 67: muy completa, con bacon y huevo. El sabor de la carne.. ¡Qué bueno! - Tarta de zanahoria. En conclusión, considero que trabajan muy bien la carne y utilizan producto de calidad. No escatiman en producto, ya que las raciones son suuuper grandes. Y, además, el precio es muy muy bueno. Sin duda lo recomiendo! En nuestro caso aprovechamos el viaje hasta allí para visitar un montón de sitios durante el camino como, por ejemplo, el embalse del Atazar.