La dueña lo vive. Sitio muy acogedor donde la señora cuenta con pasión toda la carta, todo casero (pero de verdad) y la materia de muy buena calidad. Una pena que quede tan escondido dentro de la galería comercial. Recomendación especial el entrecot y los huevos con trufa.
Local que está dentro de las galerías comerciales de Candanchu.
Lo primero que notas al entrar es un olor a humo de la parrilla, enseguida te acostumbras, pero deberían mirar la extracción.
La comida muy bien, tienen una cocina en la que prima el producto, si tengo que penetra algún pero, sería la camarera, pienso que era la dueña y se esforzaba demasiado en ser amable y hablarnos todo el rato de lo magnífico de su producto, quizás un poco cansina, debería darse cuenta de que el plato que te comes ya"habla" por si solo, con una pequeña descripción de su procedencia suficiente.
Recomendable el sitio,
Sorprendido, menú y atención excelente
Si è verificato un errore! Riprova tra qualche minuto