Fuimos a cenar y nos encantó. La situación perfecta y el servicio genial. La comida exquisita de alta elaboración y creatividad. El servicio de pan y picos es simplemente espectacular. Ponen un aperitivo buenísimo (macarons con paté) y pan de pueblo y en ese aperitivo también incluyen un dulce de despedida (trufa casera)! Pedimos falsa farsa de erizo, ceviche de gamba de carbonera y pulpo de adra y rape con crema de bogavante. Increíble...
Muy buen sitio para comer. Fuimos después de pasar la mañana en playa de los muertos porque está cerca y se aparca bien. Comimos fenomenal, los entrantes los postres la carta muy original todo. Comimos el tartar de salmón, el sandwich y unos postres y estaba todo muy rico
![4]( "Recensione")
Restaurante rico, aunque algo caro, sobre todo algunos detalles.
Fui a cenar y pedí una copa de vino de rueda que me trajeron servida a la mesa, detalle que no me gustó nada (al rellenarme la copa ya si me sirvieron en la mesa).
Te ponen de aperitivo unos macarons con foie originales y ricos.
De comer pedimos (2 personas):
Una croqueta de jamón con base de palomitas: muy cremosa y con sabor intenso a jamón, el toque de las palomitas no me aportó mucho.
Farsa falsa de erizo, tartar de vieiras y puerro, gamba roja de carboneras. Muy rico, lo recomiendo.
Carpaccio de picaña, sal y aceite. Está correcto.
Rape, vieira y gamba de carboneras, su crema de bogabante y piperrada de centollo. El plato se termina en la mesa, muy rico, sabor a mar intenso.
De poste, profiterol de mus de chocolate y pistacho con helado.
Además nos pusieron una cuajada de cortesía.
En general todo rico y el servicio bueno.
El precio de la copa de vino 4,5 me parece muy elevado, especialmente para un rueda (La Mota) cuya botella cuesta 4 euros aprox., el servicio de pan 2,75 por persona también lo veo muy elevado, el postre 10 euros también me parece muy elevado...
A destacar que los platos para compartir los sacan divididos en dos raciones, perfectamente presentadas.
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