Local situado en la periferia de la Estación de Cártama, con un espacio cercano para aparcar. Al entrar al local verás un saloncito y al fondo la barra. La decoración consta de cornamentas y otros objetos.
El trato de los camareros es muy agradable y conocen bien la carta para aclarar las dudas que te surjan.
El servicio de la comida es fluido y entre plato y plano apenas hay espera. La comida viene bien presentada y los platos tienen una buena cantidad para saciar el hambre.
La relación calidad precio es muy correcta y no creo que salgas defraudado de aquí.
Gran restaurante. Fantástico servicio que fue genuino y significativo. La comida era fantástica, nos encantó cada plato que pedimos. El dueño es capaz de recomendar grandes vinos para acompañar la comida. Recomiendo encarecidamente probar este lugar.
Siempre de 10, Amplia carta, para destacar la Carne a la piedra una locura. Los menús del día, unos de los mejores sitios para el día a día, están riquísimos, tienen mucha variedad de platos. Lo recomiendo ⭐️
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