Mucho, bueno y por el precio justo. Un restaurante con una localización excepcional. Con buen tiempo se puede comer fuera al lado del mar con unas vistas de la ría magníficas. Las raciones son muy abundantes, por encima de la media si lo comparas con otros lugares. La comida está muy rica, el cocinero tiene buena mano. La carta es extensa y variada. Si vas por la semana puedes pedir el menú del día, que sale por unos 10€ por cabeza o poco más si mal no recuerdo. Tienes un primero, un segundo y postre. Hay varias opciones para elegir y las raciones son muy generosas. Uno de nosotros pidió sopa de primero y le pusieron la sopera delante para que se sirviese la cantidad al gusto (ver fotos). En otra ocasión, había lentejas (muy ricas) e hicieron lo mismo. Conozco muy pocos sitios donde hagan esto. Si pides a la carta tienes igualmente varias opciones económicas para elegir. El churrasco de cerdo triunfa. Bajo el restaurante hay un aparcamiento público. Si dejas el coche en el parking y se lo comentas al camarero a la hora de pagar te dan un vale por 2 horas gratis en el aparcamiento. Todo un detalle a tener en cuenta. Quizás la única pega del lugar es la lentitud del servicio. Son correctos, muy amables y atentos... pero tardan bastante en atender la mesa entre plato y plato. Nosotros tuvimos que pedir que viniesen a la mesa porque hacía tiempo que habíamos acabado y queríamos pedir los postres. Tardamos más de 2h en comer un menú del día. Pero es un mal menor. Digamos que te dejan comer con calma y disfrutar de la comida. El sitio merece la pena, es muy recomendable y deja satisfecho a quien lo prueba, por sabor, por calidad y por precio.

Ubicación muy buena, un servicio de atención en terraza excelente. Probamos mejillones al vapor , croquetas caseras y una parrillada de carne, todo muy rico, los postres tiramisu y arroz con leche muy bien preparados .