La comida buenísima, la situación inmejorable, el camarero al 200 por cien, pero creo que se vieron desbordados porque no se esperaban tener lleno un día de semana y nos fuimos sin pedir el postre, pues la espera se hizo interminable.
Local situado en el puerto de Corrubedo con vistas al Parque Natural y delante de la playa.
Terraza exterior y terraza interior para disfrutar de las vistas cualquier época del año.
Un buen lugar para ir a tomar algo como para comer, con una carta variada y productos de la tierra.
Situado en la plaza de acceso al puerto de Corrubedo, tiene unas vistas muy bonitas. La decoración del bar es muy original, el suelo está cubierto con cristaleras que dejan ver al visitante decoración con motivos marinos bajo ellas, al igual que algunas de las mesas. Personal amable y educado. El chocolate a la taza está espectacular. Cuando estuvimos, había una churrería ambulante delante del bar y pudimos (a sugerencia del camarero) comprar churros y degustarlos junto con el chocolate dentro del propio bar.
Si è verificato un errore! Riprova tra qualche minuto