Un lugar de obligada visita en Tembel, está algo escondido, pero la búsqueda merece la pena. Un trato exquisito, ambiente original y acogedor y calidad en sus productos y elaboraciones. Repetiremos sin duda.
Hay que conocer el lugar. Hay que conocer la.comida: flores de calabaza, y la pasta siciliana no se pueden perder. Hay que conocer también la amabilidad y la confianza de las personas que sirven a las mesas. Hay que conocer el lugar, con sus rincones que te dejan sorprendido. Vale la pena la experiencia
De Paseo por las Galletas, y por una publicidad sugerida de almuerzo por 5€, me dirijo al establecimiento, realice la busqueda y no veía el local, después de consulta el Google Maps indicaba que estaba en la parte trasera de los locales a primera línea de la avenida, camine entre los locales y lo encontré, me senté en la terraza y solicite los platos del menú del día, todo estaba bien hasta que comenzó a llover, me cambié a la parte interna del local, encontrándome una excelente terraza bien ambientada, con mesa para jugar billar, futbolín, y otras actividades de juegos de mesas, en su pizarra pude leer que los días miércoles tiene clase de guitarra gratis, la comida estuvo buena, ensalada de tomate y queso, y unos ñokis que repeti sin dudarlo, en general es un local para volver por la noche y disfrutar un poco más del lugar. Lo recomiendo.
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