Otro acierto más en Cuenca, sitio genial para tomar café en un ambiente muy agradable con una música que acompaña para un buen momento de charla. La decoración llama bastante la atención porque está muy cuidada de hecho es curioso hasta pasar por el baño, te va a sorprender. El café con un sabor muy bueno y unas tazas que te asombran del tamaño.
Sitio, Atencion y comida de 10. Fuimos a desayunar un sábado y estaba todo lleno; pese a ello, nos atendieron en seguida y aunque a los camareros se les veía agobiados no dejaron de ser amables y diligentes. Desayunamos: 2 cafés con leche, una tostada de huevos revueltos con parmesano y otra de salmón con aguacate (11€/pax).
Solo por la presentación y sabor del café, volveríamos sin dudar. A esto le agregamos lo bueno que estaba el desayuno y lo a gusto que estuvimos tanto por lo bonito y cómodo del interior como por las atenciones de los camareros. Y ya tenemos nuestro sitio de desayunos en Cuenca. Súper recomendable.
PD: tenemos que volver a probar los dulces.
Local muy chulo y que tiene bastante sitio, el personal es muy amable y valoro mucho que sea Pet friendly (llevando a cabo una serie de normas razonables) aunque también tiene terraza.
Tienen carnet de fidelización con descuentos, detalle que se agradece ya que los precios son un poquito elevados.
En un lateral de la barra tienen un grifo tipo cañero para servirte agua tu mismo, idea que me ha gustado mucho desde el punto de vista de cliente y de camarero (yo lo agradecería en mi trabajo jeje)
Pedido:
Para beber: café con leche y café mocha choco blanco (muy rico este último)
Para desayunar: tostada de aguacate con salmón ahumado y queso feta y un gofre con plátano, fresa, Nutella y miel.
Todo buenísimo y con ganas de repetir más veces, una pena que no haya en más provincias.
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