Comimos de maravilla y la atención fantástica. Fuimos 3 personas sin reserva y todo genial

En un tiempo que ya vamos sugestionados en opiniones previas es maravilloso llegar y sorprenderte. Dicho de otro modo, siempre que se puede, se va a un sitio por comentarios favorables de terceros. A la par que incertidumbre por las negativas que siempre pesan. Por ello, más que nunca, superar expectativas es complicado. El hecho, es que era nuestro último día, buscando algo cercano al aeropuerto sur, solo podía ser Médano. O al menos para nosotros lo veíamos como mejor opción. Echamos una ojeada rápida a la zona y restaurantes en reseñas. Y ya allí, un letrero grande: Recuncho Celta, en plena entrada a la playa, a la izquierda, captó nuestra atención. Lo primero, excelente trato: servicio rápido y preocupados por los tiempos, porque les anotamos que teníamos vuelo a tomar. Me sorprendió la humildad pasmosa de una joven, Carlota. Nos asesoró estupendamente para valorar comanda y salimos encantados. Tener la consideración de salir a preguntarnos sí todo era de nuestro agrado. De verdad, que sensación más buena en calidad y atención. En nuestro caso cogimos un poco de todo: Tomates alineados, muy ricos Croquetas variadas caseras. Soy muy fan de las croquetas y para mi gusto muy sabrosas Y por último, coquinas....Eso ya fue lo más. Espectaculares. Ya en postres, se lucen de lo lindo. Aquí probamos, tarta de Santiago, crema catalana y leche frita. Sin olvidar detalle de licores; nuestra elección: crema de orujo gallego. Aunque también ofrecen "digestivo" de licor café. Animo a todo el mundo que ande por la zona e inmediaciones, que se desplace a comer o cenar ahí. Lo dicho, para vivirlo. Ha sido una tremenda sorpresa y motivo de volver pronto en nuestra próxima escapada a Tenerife. Fue sin duda la mejor experiencia en comida y broche final a nuestra semana en la isla.