La zona en donde se encuentra este restaurante es frecuentada por gente extranjera. No es que esto sea nada malo, más en Granada, con el turismo que tiene. Me refiero a ese tipo de lugares en donde los camareros te asaltan para que te sientes a degustar sus delicias, y encima de las mesas hay una gran cantidad (y variedad) de brebajes de colores, sobre todo sangrías a tutiplen. Aún así, nos quedamos y la verdad es que cenamos de maravilla. Un tomate aliñado muy sabroso y no na bandeja con frituras varias que estaban muy buenas. Por poner alguna pega, decir que los boquerones estaban poco hechos. El servicio atento y la relación calidad precio buena.
Buen sitio para comer en Granada.
Comida un 5/5 porque todo era casero. En mi caso comí: croquetas de jamón, salmorejo y rabo de todo y estaba todo muy bueno.
Servicio 4/5. Nos atendieron bastante agradable y rápido. ( Creo que no los gustó mucho que hiciese fotos a los platos 😅 )
Ambiente 4/5. Ambiente andaluz y agradable. Mucho alboroto eso si pero porque también venía MUCHA gente.
Muy recommendable .
Comimos muy a gusto, recomiendo 100% que pidáis pionono de postre (típico de Granada). Las croquetas mejorables.
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