Encontramos este bar por casualidad y debo decir que mereció la pena.
Situado en una calle peatonal del grao de Gandía donde podemos encontrar y numerosos restaurantes y bares.
Cuenta con un comedor amplio y una buena terraza.
El camarero que nos atendió fue muy amable y simpático, con el niño se portó de lujo.
Cenamos de tapeo y quedamos muy contentos tanto por la calidad como por el precio.
Si estáis por la zona os recomiendo pasar por allí.
Estuve con mi familia y devo decir que caimos allí de pura casualidad. Ibamos a tomar el aperitivo y acabamos comiendo el menú del día. Fue todo un acierto. Todo riquísimo muy bien preparado y con una atención inmejorable. Llevabamos a nuestro perro, bueno... perrazo y nos sacaron un cubo con agua para que bebiera y en ningún momento nos pusieron pegas y eso que ocupaba media terraza. Empezó a llover y nos cambiaron de mesa antes de que dijeramos nada... En definitiva un sitio estupendo de tapeo y de comida con muy buenos precios e inmejorable atención. Eso sí hay que decir que era octubre y no agosto que estarán saturados.
Es un lugar excepcional.... Yolanda es una mujer Incomparable.... Amiga.... Con ganas de hacerlo bien.... Y lo consigue... Te sorprende con su amable atención y con todas sus sorpresas de presentación de platos.... Y lo ricos que son.... No dejéis de visitar el lugar para llevaros una sensación inigualable en vuestros corazones y en vuestro paladar....
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