Deja muchísimo que desear…
Después de sentarnos, tardaron en preguntarnos por las bebidas y mas aun por la comida.
Especificamos que nos trajeran el queso antes que los platos a lo que nos respondieron que sin duda, que el queso saldría al instante. Spoiler: nos llegó toda la comida antes que el queso.
Cuando fuimos a pedir vimos que había una sección fuera de carta pero no funcionaba a lo que le preguntamos a la camarera pero ninguno nos llamo la atención. Al rato empezamos a ver platos que no estaba en la carta saliendo de cocina, platos que tampoco nos dijo la camarera como por ejemplo berenjenas que sí las hubiéramos pedido.
El servicio de camareras muy muy agradables pero sin duda falta personal que no es culpa de ellas. Después de todo, la comida estaba buena pero creo que no compensa el mal servicio.
Agradable sorpresa al descubrir este restaurante en pleno centro, donde íbamos con intención de probar carne madurada, y acabamos pidiendo además gran variedad de platos y tapas.
Destacaría el 🦞 tartar de carabinero, el 🥩 entrecot madurado y la 🥗 ensaladilla rusa de 🐟 atún con 🍳 huevo frito, aunque todo lo que probamos estaba bastante bueno y se veía de calidad.
Gran variedad de vinos y de postres caseros para disfrutar de una experiencia al completo.
En cuanto al servicio, tanto el trato por parte de Juan, como el del equipo fue estupendo.
🤵 Servicio (1,45€/persona)
Todo muy bueno y de gran calidad, pero gran parte de la carta no la tenían, a pesar de ser festivo es algo que llama la atención.
También tardaron mucho en servirnos ciertos platos, los Nigiri tardaron casi 1 hora.
Las patatas fritas algo caras.
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