Muy buena comida, se ve que hay buenos cocineros y producto de calidad. El servicio también muy amable. No le vendría mal al local una actualización.
Fuimos sin reserva y nos sentaron sin problema.
El local muy acogedor, y muy original el suelo que va al servicio, simulando un camino.
En cuanto a la comida, probamos las berenjenas de entrante, riquísimas. Los principales, yakisoba y ramen. El yakisoba estaba correcto.
Los postres muy buenos, sobre todo el de tarta de queso. El de chocolate, también muy bueno, algo denso para mi gusto.
Hubo varios detalles que no me gustaron. Tardaron más de 5 minutos entre que nos sentaron y nos tomaron nota de la bebida. También pasó mucho tiempo entre que terminamos el entrante y nos pusieron los principales, los cuales además llegaron uno después del otro, por lo que me tocó esperar a que estuvieran los dos servidos.
Tampoco me encantó que la coca cola se sirva en lata en vez de en vidrio, creo que esto es más propio de un restaurante de comida rápida que de este tipo de local. El vaso de la coca cola, el típico vaso de tubo, arañado del uso. Y el plato donde sirvieron el postre estaba desconchado. El recipiente de la soja, casi agotado.
Son pequeños detalles, en su mayoría detalles menores (quitando lo de los largos tiempos de espera), pero que es lo que, creo, marca la diferencia.
Por cierto, una de las telas aéreas estaba manchada, como si hubiese goteado algo desde el techo.
Muchas gracias, probablemente volveremos :)
Restaurante japonés con comida muy buena, limpio. Destaco que tienen platos tradicionales japoneses como el Tonkatsu, lo probé y me encantó. La atención fue muy buena, y el precio también está muy bien.
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