Buen Asturiano en pleno centro de Madrid (pequeño por eso se recomienda reservar si la intención es ir a comer). Comida casera y espectacular, hay que destacar sin duda el cachopo asturiano como plato estrella. Aunque no se queda atrás el solomillo al cabrales y las patatas al cabrales, lo unico que no nos convenció fueron los chorizos a la sidra pero eso no amargo una comida que dejo muy buen sabor de boca.
El trato por parte del personal fue extraordinario, amables y atentos en todo momento.
PD: si después de comer, queda hueco para el postre, el arroz con leche que es casero no te lo puedes perder.
Fantástico restaurante asturiano con platos clásicos hecho con amor y tradición. Cualquier plato es un acierto, cocina casera real, ingredientes de calidad, servicio cercano, gran experiencia! Repetiré seguro!
![4]( "Recensione")
Llegamos esperando encontrarnos ese cachopo con aspecto brutal que habíamos visto en fotografías. Era sábado al medio día y el local estaba al completo, es bastante pequeño pero habíamos tenido la precaución de reservar previamente, así que nos ofrecieron una mesa alta cerca de la ventana, muy agradable. Pedimos el esperado cachopo, una ración de croquetas y otra de choricillo a la sidra, platos imprescindibles cuando visitas un asturiano. Llegaron los choricillos y el sabor cumplía con lo esperado, aspecto increíble y mejor disfrute. Después fue el turno de las croquetas que justo les pasaba lo contrario que al plato anterior, parecían deliciosas pero muy flojitas de sabor (quizás túvimos mala suerte y se debió a un caso puntual); y por fin el cachopo, que si pecaba de un rebozado demasiado grueso, el reyeno era muy sabroso y con abundante queso (justo como nos gusta). La relación calidad precio es muy adecuada, gastamos menos de 20 euros por personas y fue una comida, aunque sin grandes sorpresas, muy agradable. Si estás por la zona y te apetece unas cervezas y comer algo es una buena solución.
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