En esta encantadora cafetería, la especialidad son los rollos de croissant, auténticas delicias que despiertan los sentidos con cada bocado. La combinación de hojaldre perfectamente crujiente y rellenos irresistibles crea una experiencia única para los amantes de los dulces. Además, los cafés son una verdadera joya para el paladar, con sabores ricos que complementan a la perfección la experiencia. Un lugar donde la exquisitez de los rollos de croissant y la calidad de los cafés se encuentran para ofrecer un deleite inigualable.
Paseando por la zona vimos que tenían los croissant rellenos de helado que queríamos probar y nos pedimos el del pistacho muy rico y recomendable por 3,90€ la unidad. Tienen varios sabores. Volveremos en más ocasiones.
Cafetería con un ambiente cálido que invita a tomarse un café y una merienda para ponerse al día con las amigas. Las camareras fueron muy amables. Probamos el roll de turrón que para mí gusto estaba muy empalagoso. El café sin embargo estaba muy bueno.
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