comida correcta, sin artificios, servicio rápido y amable y buen ambiente, relajado y festivo. Con unas vistas impresionantes, algunos dicen que es un poco caro, pero yo pienso que desayunar y luego hacerte un par de tapitas en este lugar, siempre será barato, pues te reconcilia con el mundo.
Está en primera línea de playa y están solos, así que pueden poner los precios que quieran, son caros, la comida bien, pero ya sabes, toca soltar el dinero.
No me gusta ser tan mala, tengo un negocio y se porque lo digo
Pero la realidad es a comes con unas vistas sin moverte prácticamente de la toalla espectaculares!
La realidad es como un bar de batalla, no miman a los clientes no hay reservas tú vas y esperas a q una mesa se quede vacía y a comer..... Yo me pedí sardinas y la verdad es q estaban buenísimas y el resto pues platos combinados de toda la vida en plan fritanga come rápido q se sienten otros.....
Y bueno comer una vez por 12€ cabeza en plena temporada y en primera línea de playa..... No lo consigues a día de hoy
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