Nos pedimos un rueda y un tinto de verano el cual estaba muy bueno, nos los pusieron con una tapita de panini de acompañante. Comida muy buena. Croquetas espectaculares, gyozas con mermelada de tomate que tenían su toque y el pan bao bastante tierno.
El personal atento y amable.
El lugar con música de ambiente de los 90/2000 y luz tenue muy acertada.
Volveremos sin duda para probar más cosas.
Buen sitio para cenar o tomar algo, mucho ambiente. Lo que menos me gustó es la música tan alta, es incómodo para tener una conversación mientras se cena. En general la comida bien. Aunque las zamburiñas sinceramente no me gustaron. Buen trato.
Lugar espectacular en Móstoles para quedar con amigos, familia o pareja.
La comida de 10. Gran variedad donde elegir.
Muy buena selección de vinos.
El equipo de 10, super atentos en todo momento.
Destacar también la música. El día que estuvimos no nos arrancamos a bailar por no obstruir el paso.
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