Si buscas un sitio donde disfrutar de la experiencia Sprial es tu sitio. Íbamos buscando donde poder comer sin gluten ni lactosa pero que no fueran las cosas típicas y sin duda acertamos. El trato espectacular, el camarero estuvo pendiente de que todo estuviera a nuestro gusto desde que entramos. Los platos de mucha calidad y poder tomar una hamburguesa sin gluten se agradece.
Elegimos Spiral para cenar porque tienen comida sin gluten y sin lactosa y fue todo un acierto.
La hamburguesa con pan sin gluten riquísima; las brochetas de langostino y el aguacate al horno no se quedaron atrás.
Sin duda repetiremos, por lo rica que estaba la comida y por el trato recibido. El camarero fue muy amable desde nuestra llegada, se preocupó de que todo nos gustara y fue muy atento en todo momento.
Cenamos muy bien. La cocina original y deliciosa. Sabores familiares pero con un toque diferente. Tienen algunos platos vegetarianos deliciosos, cervezas artesanales, postres de muerte. El local tiene muchos rincones preciosos, la terraza trasera tiene mucho encanto. Todo muy limpio y bien decorado. El trato genial. Nos costó 15€ cada uno, entrante a compartir, plato, bebida y postre. Especialmente recomendable el huevo pochado con morcilla vegana y patata.
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