No os dejéis engañar por el nombre, este sitio es italiano hasta las trancas, de fusión no tiene nada. Y eso me encanta. Local súper agradable en interior, acogedor como la casa de tu abuela y a la vez elegante como un palacete florentino. Trabajadores súper amables y atentos, todo sonrisas y cortesía. De entrante pedimos focaccia, enorme para su precio y riquísima, recién horneada, crujiente y blandita a la vez, con mucho tomate natural.
Los gnocchi con ragú deliciosos, y te ofrecen queso rallado para echarle lo que quieras.
Pizza estupenda, la mejor de este estilo que he comido en Mallorca probablemente. No es la napolitana tan espojosa que está ahora de moda pero tampoco es de estilo romano, fina y crujiente, si no que es algo intermedio, crujiente y blandita a la vez. Estupenda, muchas opciones de ingredientes interesantes y muy rica. Volveremos seguro, muchas gracias.
Estuve en julio de este año plena temporada europea. Me recomendaron el resto por la pasión que pone el cocinero que es el dueño al elaborar cada plato . Detallista y meticuloso se esmera porque el comensal quede satisfecho. El lugar es cálido se encuentra enclavado en el corazón de Palma. La camarera muy atenta. Recomiendo no irse de Palma sin conocer este lugar . 5 estrellas sin duda.
Pizza muy buena , empleados muy educados . Perfecto para gente que se queda en la rotger
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