Lastima de cafetería,que en principio tenía mucho potencial para triunfar,pero cuando no hay buena gestion por parte del dueño,pues como ocurre en muchos negocios, tiende a cerrar,una pena
El servicio es genial, pero no con la cercanía por la que se conocía antaño. Como en todas las heladerías buenas de la ciudad (me refiero al Novelty, entre otras) el establecimiento se llena en verano y el servicio es un poquito más lento. Es en esas fechas donde suelen contratar a algún que otro camarero más, a si que aprovecha si te quieres sacar dos durillos...
El local ofrece múltiples variedades de sabores y cantidad de precios para sus increíbles y ricos helados artesanos. Por no olvidad que si tu lo solicitas, puedes pedir el teclado y el ratón del ordenador y poner la música que se te antoje.
Esta heladería también cuenta con un piso subterráneo que se puede reservar gratis para fiestas, cumpleaños o para simplemente pasar una tarde divertida con tus amigos.
Helados artesanos variados y riquísimos. Nunca había probado un sorbete de sandía como este, riquísimos!!
Además los precios no eran desorbitados (3 cucuruchos y una tarrina con dos bolas por menos de 8€) y el servicio es rápido.
Si è verificato un errore! Riprova tra qualche minuto