El hotel está en reformas, pero lo tienen muy bien para el acceso, y estas reformas no te afectan para nada. Es un hotel muy cómodo, la habitación no es muy grande pero cumple con las necesidades de un hotel, con una limpieza muy buena y una cama muy cómoda. El servicio y personal del hotel es fantástico, y quiero resaltar la camarera (que desconozco su nombre) que estaba este lunes 8 de abril, a las 10:15 de la mañana, en los desayunos, ya que por un error en la explicación del check in, no nos dijeron que entre semana el desayuno cierra a las 10, en lugar de las 10:30 del fin de semana, así que nosotros fuimos a desayunar un poco después de las 10 y estaban cerrando. La chica volvió a sacar todo, aunque le dijimos que no era necesario. Aun habiendo llegado tarde, aunque no fuera nuestra culpa, tuvo una atención y un detalle, con nosotros, que valoramos mucho(Un 10 para ella y agradecerle, de nuevo, su atención). Como dato negativo, que no nos gustó nada, es que al llegar, nos informan que hay piscina climatizada, Como no lo sabíamos, no llevábamos toallas para la piscina y solicitamos otro juego para la ducha, y nos cobraron 2€ por cada una. Podríamos entender que nos cobraran una fianza, pero cobrar por pedir un juego más, no lo vemos razonable. Pero la verdad que, por la cantidad que era, no íbamos a hacer ninguna reclamación. El hotel está a 5 minutos andando del puerto y de la playa. aparcar por la zona, no es fácil, pero el precio del parking, es muy razonable por día, por lo que vale la pena reservarlo y está a dos calles del hotel. Recomiendo este hotel, aunque haya tenido el punto negativo de las toallas.