Helados muy ricos servidos de forma artística.
Un señor mayor no paraba de pedir que le dieran a probar los distintos sabores y las dependientas atendieron a sus excesivas peticiones con buena disposición y sin dar muestras de molestarse por ello.
Hace un par de semanas estuvimos en Sevilla y paramos en la heladería Amorino Gelato, cerca de la Catedral y la Giralda. Helados magníficos. Todo APTO para CELIACOS, hasta los macarons. El trato por parte de las chicas (July, Cristina y Celia) excelente. Pedimos tres helados y un macaron y fue una excelente elección.
Francisco González Ruiz
+5
Descubrimos la heladería por casualidad en un viaje a Sevilla, preguntamos por los distintos alérgenos y la atención de Celia fue exquisita, una sonrisa permanente, muy atenta a las necesidades de cada uno de los clientes de la heladería, nos orientó extraordinariamente y sin duda volveremos a visitar la heladería y buscaremos la amabilidad y simpatía de Celia, enhorabuena, no cambies.
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