Restaurante muy recomendable. Tiene parking propio, juegos para niños. Tiene varios comedores, concretamente en el estuvimos era pequeño, pero estuvimos comodos. Elegimos el menu de 22€ en el que puedes comer todo lo que quieras siempre y cuando hayamos terminado todos los platos anteriores, una fantasia para un tragaldabas.... Platos bien cuidados. Los entrantes los cogimos para compartir entre todos( anchoas del cantabrico, rabas de corral con alioli, paleta iberica, langostinos, gambas,.... entre otras) mucha variedad de segundos platos platos que tambien podias repetir. Desde luego q a punto de salir rodando del restaurante. Noemi, una de las xamareras que nos atendio, muy simpatica y nos aconsejo muy bien.
Nos hablaron de este restaurantes ya que es un sitio de buffet libre a carta. La calidad de las raciones estuvo muy bien aunque las sacaron un poco despacio y como eramos una mesa grande era un inconveniente. Los segundos fueron más flojillos que los entrantes. Como aliciente en la parte de fuera hay de todo para que los más pequeños puedan jugar.
Lugar muy agradable, una gran zona de terraza, muy amables y un menú muy bien en relación calidad-precio.
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