Excelente restaurante. Platos completos y bien presentados. Servicio camareros impecable, muy atentos sin presionar (doble servicio) como he sentido en otros lugares. Lamento que la gente, en general, no sepa hablar con menos decibelios (3* ambiente). Varios menús con precios correspondientes para cada bolsillo. Comida 18€, 22€ y 25€ cafe o postre, 1 bebida incluida. Noche fin de semana con baile 24€ o 27€ bebida no incluida.
Buen restaurante, espacioso y tranquilo, entrantes muy buenos y raciones grandes, las croquetas de bacalao espectaculares, paella de alcachofas y habas muy buena por poner alguna pega a nosotros nos gusta más sequita y si tiene algo de socarrrat mejor aún.
Precio calidad muy equilibrado. Lo recomiendo, por cierto las vistas desde el restaurantes
muy bonitas.
javier ignacio andrés alcalá
+4
Bien ubicado en un cruce de caminos.
Nos sentamos y al rato el único camarero que había hasta ese momento nos pregunta si habíamos pedido, no veas nuestra cara, un poema. No queríamos beber mucho y mientras nos lee el menú pedimos dos cervezas, pedimos el menú y le decimos que ya tenemos las cervezas, pero parece ser que esas no cuentan, solo cuentan a partir de la lectura del menú, surrealista.
Pedimos croquetas y arroz abanda. Las croquetas de bacalao muy ricas, sin embargo el arroz abanda muy malo, buena ración, suelto y con tropezones bien hechos, pero con un sabor de fondo desagradable y difícil de describir, una lástima, menos mal que el all i olí casero lo disimula todo.
Los postres variados y buenos y el precio razonable, el cremaet rico.
Al final nos lo pasamos bien disfrutando de las situaciones absurdas y el exceso de cerveza.
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