Local de ambiente rústico en el centro de la ciudad, muy bien decorado. Con diferentes comedores.
La comida, gran parte a la brasa, que según en que comedor estés, se ve cómo cocinan.
Normalmente está bien asado, algún alimento queda demasiado marcada la rejilla, pero apta para comer.
La atención, como el trato, suficiente.
El precio medio, adecuado por la cantidad y calidad.
jose alberto lozano sevillano
+5
Un servicio excelente, tiene varios salones con un ambiente cálido y un diseño acogedor. La comida me ha encantado y muy bien servido
Había ido hace muchos años y tenía ganas de volver porque recordaba que era un sitio de calidad.
Habíamos reservado mesa a las 15:30h y nos han servido casi una hora más tarde (parece que deben haber tenido algún problema), pero nos han traído algo para picar de mientras y no nos han cobrado las cuatro cañas que teníamos.
Primero hemos compartido unos huevos rotos con botifarra negra. Luego, hemos pedido secreto ibérico de bellota y medallón de black angus. Todo buenísimo. Además, te traen una pizarra caliente para que puedas cocinar más la carne o simplemente calentar algo.
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