Buena experiencia en el restaurante Samuray. Restaurante muy cómodo, limpio y tranquilo. Una buena opción.
Comida de buena calidad aunque un poco corta la carta, bajo mi punto de vista. Los platos con ganas son una muy gran opción, sobre todo gambas con sal y pimienta. También me gustó el pato.
Respecto al servicio, muy amables aunque eché de menos que toda la plantilla hablase español fluido. Muy buen detalle tener una ensalada pequeña con verduras y salsa dulce nada más sentarse.
El precio para dos, por la noche y con dos bebidas + 1 café y 1 infusión fue de 48€.
No tuvimos que reservar porque había sitio, aunque aconsejo reservar ya que se llenó al momento.
La carta es con formato QR. No me gusta, pero es lo que se está extendiendo por todos los restaurantes.
El listado de platos no es muy extenso, pero para ir un par de veces está muy bien.
La atención es muy buena y agradable. Atienden rápido, aunque como en todos los orientales, tardan en sacar los platos.
Los platos que probamos estaban bien y tenían buen sabor.
Relación calidad-precio muy buena. Sitio para repetir y aconsejar.
Este lugar me encantó, un poco costoso (menú en 20€ sin bebida incluida), pero el sabor de todas las cosas que probé estaba muy bien, la verdad es que pese al valor, para los amantes de sushi creo que es una buena opción.
Lo único es llegar temprano porque si se llena mucho tardarán demasiado en traer los platos, nosotros llegamos tipo 9pm y nos atendieron super rápido, pero a las personas con reserva de 10 en adelante, se les demoraba mucho cada plato.
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