Sitio coqueto y lo mejor de todo la comida y el trato. Todo buenísimo, desde las croquetas de txipirones, el pescado espectacular, la carne, los postres, todo magnífico, de los mejores sitios que quedan en el casco viejo. Hay que reservar y si te apetece algo, les success y te lo preparen con mucho cariño. La terraza que tiene con las vistas, estupendo, vamos que me encanta. En precio en reelección a la calidad, mejor imposible. Gracias Fernando por tu saber hacer y respetar el producto. Mil esker.
Proyecto gastronómico de Fermando Marina. Cariño y pasión por la cocina que se degusa en el plato. Productos frescos, de calidad y elaborados con mimo. La torrija caramelizada es el broche de oro!
Estuvimos el año pasado celebrando el cumple de mi Padre, y nos gusto tanto que este año repetimos en la misma fecha.
La calidad de la comida es muy, muy buena, es un placer dejarse llevar por el paladar cuando otro ha hecho sus deberes seleccionando el producto y cocinándolo todo en su punto.
Local acogedor y trato familiar.
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