Increíble. Servicio impecable, comida espectacular, trato cercano y servicial. Muy muy recomendable, especialmente el tartar, la cecina, lo que se os ocurra!
Pese a que la metre nos pareció de 12, la camarera que nos atendió daba la sensación de que le molestabamos con cada palabra que decíamos. Le molestó hasta que hubiéramos pedido los principales para compartir, cosa que ya habíamos convenido con la metre.
Respecto a la comida todo muy rico, el steak tartar sobre tuétano y el chuletón fueron espectaculares.
Eso sí, después la cuenta también fue espectacular. Preguntad el precio de todo, porque en nuestro caso nos dieron la carta de palabra y luego vino la sorpresa con la cuenta.
Lo encontramos por casualidad, el servicio muy bueno, atentos y rápidos incluso estando lleno, la carne y la ensalada de ventresca nos encantó, tambien si te gusta el dulce no dejes de probar el donut.. cambiaria los platos pequeños. Volvería encantado.
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