Ubicado en la zona de Los Peñascales, junto a Las Matas (Las Rozas), noroeste de Madrid.
La atención de los camareros es de 10, buen trato y conocen a la perfección la carta.
La carta es amplia, entrantes, pescados y carne, creo que la carne es de su propia carniceria, por lo que es de suponer que conocen muy bien el producto que ofrecen.
De entrantes recomiendo escalopines de foie fresco con cebolla caramelizada, tartar de atún rojo y bacalao en tempura sobre salsa de pimientos.
Como principales destacar el solomillo, muy tierno, de gran sabor, a elegir entre salsa de pimienta verde o cabrales, recomiendo esta última.
Los postres al igual que la carta son bastante buenos.
Recomiendo la tarta de 2 chocolates.
El precio no es demasiado caro, el tipico de un restaurante bueno.
La carta de vinos es amplia.
Francisco Javier Grande Fariñas
+4
"Casa Julián" es un restaurante situado en Los Peñascales - Las Matas (Madrid), cerca de Torrelodones. Es un pequeño chalet de dos plantas que desde fuera no aparenta lo que es. Al entrar parece un simple bar, pero en la planta superior te sorprende un acogedor salón atendido por unos camareros uniformados de negro, diligentes, amables y muy profesionales. Reservé por teléfono mesa para dos el día 30/12. No había menú del día y me dijeron que si queríamos cordero, cochinillo o arroz debía decírselo antes de ir. No fue nuestro caso. Mi amigo y yo elegimos de la carta, guiados por el apartado de "sugerencias". Resulta que sí nos podían servir arroz meloso con pollo y setas. Ese fue nuestro plato principal. Delicioso. Pero antes nos tomamos un par de cervezas y pedimos unos entrantes para compartir: media ración de croquetas caseras de jamón (4 unidades) y unos chipirones sobre verduras. Mientras esperábamos nos pusieron un aperitivo con puré de patata picantito y torreznos (buenísimo). Las croquetas eran realmente caseras, con una masa muy elaborada y fina. Los chipirones estaban riquísimos; nos sorprendió la propuesta, nunca los habíamos comido así, sobre verduras. Buena presentación y maridaje. Muy buenos. Degustando el arroz nos sentimos como en casa. Un plato simple pero delicioso con un potente y agradable sabor. Lo acompañamos con un par de copas de Ribera del Duero. De postre pedimos, para compartir, una ración de tarta de queso al horno. Fantástica!. Acabamos con dos cafés. Todo por 59€, IVA incluido. Excelente relación calidad/precio. Muy buen trato y servicio. Absolutamente recomendable. Volveré, sin duda.
Carne de gran calidad, buen servicio y unos postres caseros excelentes. Destacar el chuletón de Ávila; muy bueno.
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