Fuimos a celebrar un cumpleaños y todo lo que pedimos estaba delicioso.
De entrantes pedimos los calamares, que no los había visto tan finitos (muy buenos) y unas gambas a la plancha que se me cae la baba de recordarlo.
De segundo se pidió una lubina a la sal muy bien cocinada y un arroz de secreto, boletus y espinacas hiper umami. Sin duda repetiría.
Por poner un pero, arreglaría el tema del ruido ya que al estar todo acristalado rebota mucho y es un poco incómodo.
Muy recomendable!
Me lo habían recomendado varias veces y por fin pude ir el otro día.
La atención de 10/10. En todo momento el equipo atento de que no nos faltase nada.
La comida espectacular. Destacar los torreznos, las fajitas ibéricas y arroz negro.
Perfecto para ir con la familia, amigos o pareja.
Un restaurante donde la atención es de primera, buen ambiente y fácil de aparcar el coche. Lo recomiendo
El fideuá de mariscos
tenía el fideo al dente como debe ser, el único detalle es que le colocan pocos mariscos
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