Antonio Sánchez García
+4
El local es moderno y muy bonito y los camareros, al menos el que atendió mi mesa, muy profesional, sin duda el que vende es el camarero y este supo hacerlo bien.
Los platos estaban buenos, un poco dulces pero me gustó la mezcla de sabores. Comidas diferentes a lo típico que sueles tener en cualquier sitio.
Me gustó bastante la experiencia.
Nos quedamos con ganas de cenar, pero la comida del día siguiente no la perdonamos (nos llamó la atención el local). No nos defraudó, todo lo contrario. Comida de autor y con variedad. Importante, menú de mercado y agua filtrada, dando ejemplo de sostenibilidad. Platos muy bien presentados y lo más importante, riquísimo todo. El servicio estupendo, unos camareros atentos y profesionales.
Anotado para cada visita a Mérida.
El sitio es muy chulo, tanto el salón como el patio invitan a disfrutar tranquilamente de la cena o la comida. Por fuera no imaginas que dentro encontrarás un lugar tan bien ambientado, muy agradable
Pedimos la flor de alcachofa (buenísima), el arroz con carrilleras y helado de pistacho. El chico que nos atendió estuvo muy atento, para nosotras 2, el arroz era bastante cantidad y no nos lo pudimos terminar, enseguida nos ofreció que nos lo envasaban y nos lo podíamos llevar a casa.
Volveremos a Mérida y volveremos a este restaurante.
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