Un hotel de montaña precioso. Hemos estado 2 días rodeados de una naturaleza espectacular (parque natural Sierra de las Nieves). Nos han atendido de maravilla. La comida es buenísima. Muy amables al permitir que nuestra perrita estuviera con nosotros en la zona de la piscina. Si quieres disfrutar de calma y naturaleza, no lo dudes. Sin duda, volveremos. Muchas gracias por vuestra amabilidad.
No nos alojamos, solo fuimos a comer al restaurante, está enclavado en una zona alta, unos 500mts, que te da unas vistas del Valle del Guadalhorce y Sierra de las Nieves impresionante. De decoración clásica andaluza con vegetación variada, incluso un preciso Pinsapo, tiene una piscina con unas vistas espectaculares. La comida está exquisita, muy bien presentada y bien servida, tienen una carta de vinos buena y los postres también son buenos, un sitio en esta época no masificado, ideal para relajarse y disfrutar de una comida o cena tranquilamente.
He ido 5 veces a este Hotel y para mi, es tan acogedor y relajante, que es casi terapéutico. Sencillo, limpio, vistas impresionantes, relax, buena cocina (restaurante a la carta), y el personal de 10. El único problema, insectos pero es lo lógico estando en la naturaleza. La zona nueva de comedor exterior que hicieron hace un año es ideal. Todo de madera con pergolas, para disfrutarla con la buena restauración que ofrecen. Como sugerencia indicar que las habitaciones de la planta superior permiten abrir los ventanales para el frescor de la noche.
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