Una buena experiencia. El sitio está en un lugar privilegiado, con buenas vistas y un local agradable. Se cena sin mucho jaleo, el ambiente es tranquilo.
La atención es fantástica. Muy atentos, educados y amables.
La comida está buena, las cantidades son muy justas para pedir en pareja, pensé que me sorprendería más. Pero destacaría entre lo que pedimos la fideuá de choco con alioli.
Nos encantó la carta de vinos, muy buena selección!!
El precio me pareció algo elevado para lo que es, hay una mala relación entre la cantidad y el precio.
El producto es bueno, pero la ejecución de cocina el pescado mejorable, exceso de aceite, para lo que se paga, aunque el producto es fresco, el precio elevado para el tamaño. El servicio de los camareros es muy bueno y el lugar idílico para comer, eso es innegable
Absolutamente recomendable. Comida de producto, platos de altísima calidad. Probamos ostras, zamburiñas negras, ceviche de carabinero, navajas thai y rape; de postre el coulant. Si tengo que decir un plato más flojo diría las navajas y no podría elegir un favorito, estaba todo muy rico. Muy buen ambiente. Servicio muy bueno, a destacar que siempre toma nota la misma persona por lo que te puede recomendar en caso de duda. Destaco la forma de servir las cañas, estaban perfectas. El café muy bueno. Tiene acceso a la playa. Se aparca fácil en los alrededores. Precio por persona si eres de buen comer, sobre 75€. Lo recomiendo mucho!
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